De vez en cuando, nuestro amigo T.I., entre temporada y temporada en la cárcel, se nos pone a hacer colaboraciones y se marca unos buenos temas. Para esta ocasión, colabora con el cantante Robin Thicke y con Pharrell, al cual tampoco se le veía sacar algo medio decente desde hacía tiempo.
El resultado no es precisamente una obra de arte, pero es una canción simpática, con un ritmo con muy buen rollo y un videoclip que le viene como anillo al dedo. A mi la canción, como que me gusta para un ratito, pero cuando ya pasas un tiempo oyéndola, te cansa, aunque tiene un ritmo muy bailable. En cuanto a la letra, trata sobre los piropos que los cantantes les dedican a las modelos, tales como "zorra" o "yo tenía una zorra, pero no era tan mala como tú", y bueno, os podéis imaginar el resto. Habría que lavarles la boca con lejía. Para quien le pueda interesar el dato, la modelo principal es la joven Emily Ratajkowski (no tenía suficiente con apellidarse Rata que encima van y le ponen detrás JKOWSKI), muy de moda en el mundillo.
Y de nuevo, Pharrell Williams haciendo de las suyas. Parece que cuando se pone a trabajar, se pone en serio (esto es de lo más bueno que ha hecho en bastante tiempo). El dúo Daft Punk, creador de canciones como "Around The World", o "Technologic", reaparecen en escena con "Get Lucky". No descubro nada si digo que el cambio de música ha sido bastante drástico, pasándose de los sonidos electrónicos usados hasta decir basta, hacia esta especie de tema Disco, que más podría sonar a sacado de un álbum de los Bee Gees (pero sin tanto agudo).
La recepción del tema ha sido de lo más positiva, aunque es algo que suele pasar cuando un grupo vuelve a la carga después de un parón, y por ahora le está yendo muy bien en las listas de éxitos, pero nos queda ver cuanto tiempo podrán seguir aguantando el tirón. Por ahora, el videoclip es bastante cutre, con el dúo con sus famosos cascos puestos y Pharrell cantando, mientras Nile Rodgers (¿o debería decir, Whoopi Goldberg?) aparece tocando la guitarra (porque la letra se la sabe bien poco). Las grandes canciones no necesitan grandes videoclips, pero a veces tampoco viene mal currárselo un poquito más.
La canción habla sobre la química que surge en las parejas, en determinados momentos, en un tono sexual aunque también eliminando ese tono en cierta medida. Digamos que, al contrario de lo que ocurre con la canción anterior, en este caso se pretende piropear de una forma más sutil, lo cual resulta de agradecer.
Allá va Pablo, con otro tema de "me he puesto romántico", porque en esta vida hay que arriesgar, hay que mezclar estilos y tal... Y nos sale con tema muy muy flojito, musicalmente hablando claro. La voz, como siempre, estupendamente, de eso nadie se puede quejar. Pero la música, muy lineal, sin un elemento diferenciador que la haga destacar sobre otras canciones, salvando la voz de Pablo, que es lo único diferente a otros artistas.
Por ahora, sigo sin ver la faceta de músico en Pablo Alborán por encima de la de cantante. Lo cual no es que esté mal, pero si con la voz ya tienes un mercado ganado, con una música más en condiciones puedes aspirar a un mercado mayor.
Sin embargo, con el videoclip ha demostrado una mejora bastante importante en cuanto a los anteriores. Un trabajo muy simple, en blanco y negro, con planos que demuestran un buen trabajo de realización detrás. Me parece muy buena idea el plano en el que Pablo pasa a formar parte de la historia, donde el grupo de danza aparece detrás de él mientras toca el piano, así como las capturas de cámara lenta y la escena de la cama ardiendo.
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